Verano para desconectar.

Para el Feng Shui el verano pertenece al Elemento Fuego. Esto es muy significativo sobre todo porque muchos de los cambios que incluimos en nuestro día a día están muy relacionados con este Elemento.

En primer lugar nos "mostramos" más, y no solo a nivel físico, por el calor, en la playa y demás lugares de ocio. Más bien a la hora de actuar y mostrarnos como somos: hay más salidas con amigos y familiares, viajamos, salimos, y, muchas veces, al no estar tan vinculados al área profesional nos desinhibimos más. 

Es bueno aprovechar el período vacacional para desconectar, relajarse y fluir tanto con lo externo (calor sobre todo, salidas, trasnochar) como con lo interno (necesidad de ser uno mismo durante un tiempo).

Con la llegada del verano cambiamos muchos de nuestros hábitos, tanto en la alimentación como en las actividades. Necesitamos comer cosas más frescas (Yin para contrarrestar el Yang). Preferimos los lugares con agua fresca como la playa, los ríos y lagos (de nuevo Yin para contrarrestar el calor Yang). Solemos hacer siestas después de comer (otra vez Yin para contrarrestar tanto Yang) y, por las noches, a la fresca, es cuándo elegimos salir, quedar, reunirnos (aquí el yang del Fuego se impone al Yin de la noche).

Uno de los puntos importantes a tener en cuenta es que tenemos que aprovechar para desconectar del trajín del día a día, de las preocupaciones, de las obligaciones y dedicarnos más a lo que realmente nos gusta o sentimos, sea quedar con amigos que a lo largo del año tenemos más abandonados, realizar actividades que nos llenan, sean leer, pintar, pasear, hacer senderismo o cualquier otra que nos guste.

Este punto es fundamental porque necesitamos un respiro, un intervalo, lo que en el Feng Shui se llama un DOJO, para recuperar y reponer fuerzas para poder seguir con el día a día que nos espera al final de las vacaciones. Por eso, no pueden ser unas vacaciones estresantes, llena de obligaciones, sino creativas, divertidas y donde el descanso y el tiempo para uno/a mismo/a está presente.

Por eso, os deseo un muy buen verano, y seguimos en septiembre.